Antequera formará parte del ‘Ciclo de Órganos de Andalucía. Música y Patrimonio’

La Junta de Andalucía impulsa el ‘Ciclo de Órganos de Andalucía. Música y Patrimonio’, un nuevo ciclo musical de órgano que, desde inicios de noviembre y hasta finales de diciembre, “va a poner de relieve la valiosa red de instrumentos históricos de las capillas, iglesias y colegiatas andaluzas, resaltando su excepcional valor patrimonial”, ha indicado la consejera de Cultura y Deporte, Patricia del Pozo.

Durante la presentación de esta cita, del Pozo ha subrayado que “nace con vocación de continuidad, es un programa innovador, que aspira acercar a todo tipo de públicos la música de órgano, sin duda, una de las grandes desconocidas de nuestro repertorio”. Por este motivo, el certamen contará con la participación de destacados organistas, sopranos, tenores y otros intérpretes de viento y percusión, “uniendo patrimonio histórico-artístico, con el patrimonio natural y etnológico en una iniciativa única de gran valor cultural y social”.

El programa recorrerá catorce enclaves excepcionales de Andalucía realizando conciertos con acceso libre y gratuito, comenzando el 1 de noviembre con un concierto de la soprano María Ogueta y del organista Abraham Martínez, en el órgano barroco de la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de Alcalá del Río (Sevilla).

En la provincia de Málaga, hará parada en Antequera y en Marbella. Será el 29 de noviembre, cuando se podrá disfrutar de la maestría de Martin Böcker en el monumental órgano de Antequera situado en la Iglesia de San Sebastian, una de las piezas más valiosas del patrimonio organístico andaluz.

El gran órgano fue construido en 1803 por Tomás de Inés Ortega, reutilizando la caja barroca del instrumento anterior realizado en 1734 por fray Francisco Alejo Muñoz. Discípulo de Julián de la Orden, artífice de los órganos de la catedral de Málaga, Ortega plasmó aquí una obra de gran calidad técnica y musical, con influencias directas de su maestro.

La caja, elaborada por Bernardo de Asensio, destaca por su compleja estructura de castillos curvados, cornisas y ángeles trompeteros, todo ricamente decorado.

Restaurado en 2007, el instrumento conserva su magnífica sonoridad y continúa siendo una de las piezas más sobresalientes del patrimonio organístico malagueño, fiel testimonio del esplendor musical de Antequera.