Se han recuperado los restos de 73 personas, más del 20% de ellas mujeres, una proporción muy superior a la habitual en este tipo de intervenciones
Campillos ha cerrado la primera etapa de los trabajos de exhumación en una de las dos fosas comunes localizadas en su cementerio municipal. Tras dos meses y medio de excavaciones, este pasado 29 de agosto el equipo técnico finalizaba una primera fase donde se han logrado recuperar los restos de 73 personas ejecutadas durante la Guerra Civil y donde más del 20% de los cuerpos exhumados pertenecen a mujeres, un dato especialmente significativo si se tiene en cuenta que lo habitual en otras fosas similares es que este porcentaje no supere el 5%.
La magnitud de esta primera fosa ha superado las estimaciones iniciales. A medida que han avanzado los trabajos, los expertos han elevado sus cálculos y ahora se estima que el número total de víctimas podría superar las 150, repartidas entre las dos fosas del recinto.
El análisis preliminar realizado por arqueólogos y antropólogos forenses apunta a un alto grado de violencia en las ejecuciones. En paralelo a la elaboración de los informes técnicos, ya se ha iniciado la toma de muestras óseas con el objetivo de realizar pruebas de ADN que permitan la identificación de las víctimas. Además de los 73 cuerpos pertenecientes a represaliados, también se han localizado los restos de otras nueve personas, enterradas en ataúdes en los años posteriores a la contienda y situadas justo encima de la fosa común.

«Es un acto de justicia y reparación. No se trata de reabrir heridas, sino todo lo contrario, de dignificar a todas esas víctimas y conseguir, después de casi 90 años, que sus familiares puedan darle sepultura y poder cerrar así esta etapa tan negra de la historia de España”, ha señalado el alcalde de Campillos, Daniel Gómez.
La intervención ha contado con una financiación cercana a los 30.000 euros y ha permitido también la participación de alumnado de la Universidad de Málaga, que ha tenido la oportunidad de iniciarse en el campo de la arqueología forense y la investigación histórica.
La segunda fase de la exhumación está prevista para 2026 y forma parte de un proyecto más amplio impulsado por la Junta de Andalucía y la Universidad de Málaga, en el marco del Plan Estatal de Exhumaciones promovido por la Secretaría de Estado de Memoria Democrática. El proyecto está siendo coordinado por las profesoras María José Berlanga Palomo y Encarnación Barranquero Texeira, de los departamentos de Ciencias Históricas e Historia Moderna y Contemporánea de la UMA, respectivamente.