Se puede visitar hasta el próximo 31 de agosto, en horario de 18:00 a 21:00 horas, de lunes a viernes en la Sala de Exposiciones Antonio Montiel del Ayuntamiento de Antequera
El Ayuntamiento de Antequera ha presentado esta semana ‘La Luz de Antequera’, una nueva apuesta cultural en la ciudad en forma de exposición que sigue la línea marcada por ‘La Forma Antequerana de las Piedras’, una muestra que en 2024 dedicaron al oficio de los picapedreros municipales, y que ha dado inicio a una serie de exposiciones que, de forma anual, destaquen «eventos, oficios o acontecimientos relacionados con Antequera».
Para la puesta de largo, en la Sala de Exposiciones ‘Antonio Montiel’ del Ayuntamiento de Antequera, estuvieron presentes el concejal responsable de Cultura y Patrimonio Histórico, José Medina Galeote, y el teniente de alcalde de Hacienda y Eficiencia Energética, José Manuel Fernández. Se podrá visitar hasta el 31 de agosto, en horario de 18:00 a 21:00 horas, de lunes a viernes, conteniendo un compilado de documentos, objetos y elementos que arranca en 1892, fecha en la que llegó la electricidad a Antequera, hasta llegar a la iluminación del presente.
En este caso, se ha organizado una muestra que «es de corte muy minimalista y está preparada para que hagamos un pequeño paseo por el tiempo, por el espacio y por la ciudad. En ella nos daremos cuenta de que hasta no hace mucho no había luz en Antequera. Las fechas se remontan a 1892, donde está fechado oficialmente que la electricidad llegó a Antequera. ¿Cómo se hizo esto? Pues mediante pequeñas empresas privadas, cuya documentación, contratos y otras curiosidades se pueden ver en todas estas vitrinas y expositores», explicó Medina Galeote, señalando que «es esencial poner en valor los oficios municipales que han ido evolucionando a la vez que crecen las ciudades».
Además, en la sala que alberga la exposición se pueden observar dos grandes fotografías, ambas de Antequera, en diferentes épocas «para que veamos un poco ese cambio y esa variación en el tiempo de la electricidad y la luz en la ciudad», explicó el responsable de Cultura. La exposición no sólo muestra la evolución histórica y orígenes de la electricidad en la ciudad, sino que «sirve de homenaje a trabajadores municipales que a diario trabajan en el suministro de calles y edificios. Esta propuesta es también un relato histórico de la evolución y desarrollo de ciudades andaluzas».



«Es la primera exposición donde saliendo de estas cuatro paredes de la sala podemos seguir viendo la evolución a la que se hace referencia» explicó Fernández, indicando que «se reflejan esos primeros pasos para darle luz a una ciudad viva como Antequera en el siglo XX y que ahora, en pleno siglo XXI podemos observar como la ciudad avanza en eficiencia energética, no solamente con el alumbrado público sino también con esa iluminación ornamental que tan delicada y detallista tenemos».
UN RECORRIDO HISTÓRICO POR LA ELECTRICIDAD
Los inicios de la electricidad en Antequera se pueden establecer en el periodo entre 1892 y 1912. Un hecho que se
puede considerar un ejemplo representativo de lo que ocurrió en las ciudades andaluzas de pequeño y mediano tamaño.
La electricidad llega a Antequera, en 1892, de la mano de dos sociedades privadas: «Azucarera Antequerana» y «José Bellido y Compañía», la primera de ellas para autoconsumo y la segunda para abastecer el alumbrado público.
La primera noticia sobre un intento de llevar la electricidad a Antequera data del otoño de 1891, cuando el abogado Nonite Guille, representante de una fábrica de lámparas incandescentes de París, la «Continental Edison», pidió autorización al ayuntamiento para colocar los cables necesarios para establecer la iluminación eléctrica.
En los años finales del siglo XIX al XX, la tecnología eléctrica experimentó avances considerables y desde finales del ochocientos, las mejoras en la producción y distribución abarataron el coste de esta energía, lo que permitió su generalización.
En los años de entreguerras se consolidaron las grandes eléctricas como «Sevillana de Electricidad», «Mengemor» o «El Chorro». En Antequera, «El Chorro», desde mediados de los años treinta fue adquiriendo las eléctricas que actuaban en
el municipio, quien a su vez fue absorbida por ‘Sevillana» en 1967. En 1968 esta compañía adquirió la eléctrica de los Carreira, la última de carácter local que funcionaba en Antequera.